101 Ronda

¿Qué sería una vida sin proponerse nuevos retos? ¿Sin buscar aventuras todavía no realizadas con las que superarte? ¿Sin meterse en líos y buscar la forma de salir de ellos?

Suele decirse que los seres humanos tenemos un alto grado de inercia, resistencia o miedo al cambio… y realmente es cierto. Generalmente nos incomodan. Utilizando una expresión muy de moda en el mundo de la motivación personal, y mucho más después de la explosión que estamos viviendo estos años del coaching (rama profesional que nos está regalando grandísimos profesionales, miserables oportunistas y muchos falsos predicadores del siglo XXI, a partes iguales), podría decirse que los cambios hacen que salgamos de nuestra Zona de Confort. Lo que pasa es que algunos se manejan mejor e incluso disfrutan este estado vital.

Aún así, y aunque pueda parecer un poco contradictorio, soy un convencido de que las personas somos, por encima de todo, cambio en estado puro. Lo que pasa es algunos sufren más vértigo, o viven excesivamente acomodados.

¿Y por qué os cuento esto? Sencillamente porque quiero hablaros de mi próximo reto. Y la verdad, en los últimos meses el cambio se ha subido al tren de mi vida y se ha convertido en un buen compañero de viaje, así que podría contaros acerca de bastantes y diferentes desafíos: cambios de trabajo, viajes exóticos, vivencias en otros países, emprendimiento profesional, vivir un embarazo,… ¡Qué importante es mantener ilusión por crecer, por avanzar, en todas las facetas de tu vida!

Sé que muchos de vosotros ya os habéis asomado por una ventanita través de este blog a mis aventuras deportivas, sobre todo en el gimnasio. Aunque no quiero que os hayáis llevado una idea equivocada: realmente soy un deportista aficionado bastante resultón. Mi relación con el deporte no se ciñe exclusivamente a las anécdotas que os cuento, y que probablemente son de las más humillantes que he sufrido (aunque no os preocupéis, morbosillos, que hay más… lo que pasa es que todavía tenemos que conocernos e intimar lo suficiente para contarlas). Desde bastante joven he practicado muchos tipos de disciplinas deportivas (algunas con más suerte que otras), con una cierta regularidad (según en que etapas de mi vida), e incluso compitiendo en campeonatos en algunas de ellas (pero nunca como profesional). Podría decirse por tanto que el deporte es una parte importante en mi vida, y que no me va demasiado mal con él.

Así, el running (o como lo llamábamos cuando empecé a practicarlo, salir a correr), siempre ha sido una actividad que me ha resultado muy gratificante (frente a los muchos que la consideran aburrida hasta la muerte): me relaja, me mantiene en forma y me permite ver mundo. Eso sí, siempre lo he practicado en distancias cortas, y muy de cuando en cuando. Hace cosa de cuatro años me dio más fuerte de lo normal, llegando a hacer entrenos semanales de hasta 10km. Pero en seguida, al año aproximadamente, me desenganche casi por completo… hasta hace 10 meses, que recaí todavía con más fuerza.

¿Cuántas carreras he corrido en este tiempo? Ninguna. He estado a punto dos o tres veces, pero eso no cuenta. Ni carreras de 5k o 10k al inicio, cuando estrenaba tiradas más cortas; ni medias maratones, cuando cogí algo más de resistencia; ni siquiera me he planteado correr una maratón, ahora que ya resisto distancias parecidas en mis salidas semanales (la última fue de 30km y lo pasé realmente mal). Y entonces… ¿Qué pensaríais si os digo que en poco más de un mes pienso participar en los 101 Km de Ronda? Quizás antes os tenga que explicar a algunos que los 101 Km de Ronda se trata de una carrera (de competición oficial), por el campo (con sus buenas subidas y bajadas a montañas), con 101 Km de distancia (como su nombre indica), y un limite de tiempo de 24 horas …. ¡Ahora si podéis decir que estoy loco!

Para quien no este muy familiarizado con este deporte, os puedo decir que la gente suele prepararse durante un año completo para este tipo de carreras, siguiendo además durante los últimos 6 a 4 meses un plan de entrenamiento especifico, con actividades totalmente planificadas 5 o 6 días de cada semana…y yo he empezado hoy. Es cierto que llevo ya un tiempo haciendo bastante deporte, y que estoy aceptablemente en forma…pero quien sepa un poquito de esto, sabe de sobra que con eso no basta.

¿Me he vuelto loco entonces? ¿Os estoy contando una patraña? ¿Me rajaré? Pues la verdad, ahora no sé la respuesta a ninguna de estas preguntas; lo iremos viendo con el tiempo. Solo tengo claro que los 101 Km de Ronda son mi nuevo desafío (después de este, ya veremos que otro me invento).  Y de lo que también estoy seguro es que, en las seis semanas escasas que quedan hasta la prueba, El Blog de Angel Sierra tendrá una nueva categoría de artículos donde trataré de explicaros un poco la historia, belleza y dureza de esta prueba; os hablaré de mis entrenamientos, los preparativos, el material necesario, el viaje… y, por supuesto, de mi experiencia una vez haya participado.

Quizás estas semanas os falle un poco y no publique en el blog todos los días (me queda poco tiempo de entrenamiento y las sesiones serán intensivas en tiempo y esfuerzo). Pero os garantizo que todas las semanas tendréis noticias de primera mano del avance de toda esta historia.

P.D. Es un poco pronto para que penséis en crear mi propio club de fans… pero vamos, tampoco voy a ser  yo quien diga que no.

The following two tabs change content below.

Angel Sierra

"Saber escuchar no siempre significa no tener nada que decir." Cinéfilo, tecnólogo, deportista, tímido, imaginativo, trabajador, viajero, comunicador, compañero, disfrutón, tranquilo, loco, músico, cocinero, gestor, bailarín, empático, friki, complicado, géminis... siempre diferente. Huye de encasillamientos; de lo que has sido o dicen que eres. Sé lo que quieras ser... sobre todo buena gente.

Últimos posts Angel Sierra (Ver todos)

Entradas relacionadas

4 comentarios en «101 Km de Ronda (I): El reto»

  1. Un par de apuntes. No soy especialista en embarazos, pero, ¿no deben las embarazadas tener los mínimos sobresaltos posibles?

    Al mismo tiempo, hace unas semanas estuve hablando con un running semi-amateur precisamente sobre esa prueba. El comentario que recuerdo ahora es «… lo peor es la gente que va sin preparación, acaban perdidos en el monte con hipotermia, lesionados, etc… es cuestión de tiempo que pase algo más grave».

    Y ahora, siguiendo el ejemplo de nuestros políticos, decirte que confío al 1.000×100 en ti (jajajajaja). Mucho ánimo y será un placer leer tu preparación.

    1. En realidad es una prueba muy dura… pero con ciertas precauciones, no es para nada peligrosa… Lo que pasa es que habrá cada borrico suelto…

      Está claro que acabar es un reto, y que nadie está a salvo de lesiones, indisposiciones o similar (ni siquiera los profesionales)… Perderse ya es más difícil, con legionarios en cada ramificación del camino principal. Tampoco es un recorrido muy técnico donde te puedas caer, o despeñar.

      S parte de esto, hay unos pocos cuidados generales que sí hay que seguir: hay que hidratarse continuamente, protegerte del sol, comer con frecuencia, llevar ropa acorde al tiempo que vaya a a hacer (teniendo presente que correrás por el día, y gran parte de la noche, sino toda)…

      Dicho esto, a día de hoy dudo de mis posibilidades de acabar… Pero no por peligroso, que no lo es… Sólo por agotador hasta el límite de la resistencia humana jajaja

      Ya os iré contando…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.