Resulta que ya estamos en la semana 17 de embarazo, quizás la 18 (ecógrafo y médico no acaban de ponerse de acuerdo). Nuestro primer embarazo, ya cercano a su ecuador. ¡ Que fuerte ! Y parece que fue ayer cuando estábamos en la semana 16.
Y te preguntarás ¿Por qué no he torturado hasta ahora a los lectores con las típicas historias acerca de embarazos que a casi nadie interesan? Un argumento a tener en cuenta es que este blog apenas tiene una semana de vida. Además me gustaría poder decir que el principal motivo es que yo no pienso hacer un blog convencional. Que pienso escribir post prenatales diferentes; para ti, por supuesto, pero también para el resto de públicos. O mucho más fácil, que directamente no voy a hablar sobre el tema. Pero esto no sería del todo verdad. Este embarazo es una parte muy importante de mi vida, por lo que no puede quedar fuera de este blog, sino más bien ser una parte vital del mismo. Creo además que, como sucede con el buen vino, bien servido y consumido con moderación, este tema “entra fácil”.
Así que si te parece no voy a relatar la forma en que nos enteramos de la noticia, ni las sensaciones de la primera eco. No voy a desvelar si eres niño o niña (eso tú ya lo sabes), o si hemos elegido ya el nombre. Si mama sufre molestias, tiene ya “tripita”, o ha comenzado a sentir pataditas. Si estamos preparando el cuarto, o si nos hemos apuntado a algún curso de preparación al parto. Cuantas veces nos levantamos por la noche para ir a hacer pipi, o cuantos centilitros por sentada estamos promediando. No diré nada de esto… por ahora. Que no prometo nada.
Lo que si es cierto es que estas 17 semanas (o 18, que no voy a ser yo quien empiece ya a quitarte años) han servido para “creernos” realmente la noticia. Cuatro meses realmente no es mucho tiempo, pero han dado para asistir a una boda “diferente” y muy especial, realizar un viaje a Perú y Chile, enterarnos de la “notica”, dejar mi trabajo (todo a su tiempo),…De todas formas yo todavía mantengo esa sensación de padre adolescente y primerizo, sorprendido por haber recibido este regalo al primer intento. Claro que después pienso en los 40 años que cumpliré este 2014, y en los años y años que hemos estado intentando por todos los medios lograr este embarazo. La vida normalmente no trascurre como imaginas, pero eso no la hace menos “mágica” y sí mucho más fascinante de vivir. Además siempre he creído que con actitud positiva las cosas llegan cuando tienen que llegar. O como dijo en su día Abraham Lincoln “Casi todas las personas son tan felices como deciden serlo.”
Pero bueno, ya seguiremos hablando tu y yo del tema. Que todavía apenas he dicho nada, y ya he servido la primera copa. Y como digo, no se debe abusar…
Angel Sierra
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